En relación con la figura del octógono presente en nuestras culturas ancestrales, sólo apuntar la relación con Venus. En este sentido, os enlazo este artículo:
jsa.revues.org/512.
Cito textual:
Es preciso señalar ciertas diferencias con las religiones prehispánicas. En primer lugar, es notable que, en el Gran Nayar, no se han encontrado indicios de que exista o hubiera existido conciencia alguna sobre el octaeteris, es decir, el período de ocho años o 2,920 días que une los ciclos sinódicos del Sol (

, la Luna (99) y Venus (5). Es muy probable que aspectos importantes del culto venusino sí se hayan perdido, tal vez hace ya mucho, pero esto no implica que las religiones nayaritas perdieran su coherencia e integridad. Por otra parte, Aveni (2002, pp. 2, 31, 72-81 y 122) explica que el culto prehispánico a Venus basado en el octaeteris implicaba, precisamente, establecer correlaciones entre el ciclo de este planeta y el año agrícola-solar o las fases de la Luna. Las actuales concepciones coras y huicholes sobre Venus llevan esta tendencia al extremo, subordinando todo a una lógica calendárica solar, lo que implica que (ya) no se practica o no importa la observación efectiva de las diferentes fases de visibilidad o invisibilidad de Venus. Sin embargo, a pesar de la simplificación que podemos constatar con respecto a los cultos prehispánicos en torno a Venus, los personajes míticos nayaritas asociados con la estrella de la mañana y la estrella de la tarde conservan una importancia que no debe considerarse circunstancial. Aparentemente, las transformaciones cíclicas que sufre el planeta Venus constituyen un paradigma cultural de gran envergadura.
Es curioso observar por otra parte, cómo en la culturas de la antigüedad aparece representada Venus como una estrella de ocho puntas. La estrella de ocho puntas representaba también a la diosa Ishtar, cuyo planeta era Venus y tradicionalmente el octógono es tradicional y simbólicamente la representación de la resurrección en el cristianismo por ejemplo. Por otro lado, cada 8 años, que son 8 órbitas de la Tierra y 13 de Venus, ambos planetas se encuentran 5 veces en sus puntos más cercanos, al mismo lado del Sol (os enlazo la página:
asteromia.net/sistema-solar/sistema-sola...ctogonal.html#inicio.
Creo que tenemos un hilo abierto sobre las construcciones basadas en el octógono, pero es indudable hacer referencia aquí al hecho de encontrarnos representaciones sumerias en distintas estelas haciendo referencia al mismo símbolo como una estrella de ocho, dieciséis o seis puntas, formando a su vez un conjunto con siete cuerpos celestes asociados.
Por cierto, la flor de tres pétalos también llegó a ser emblema del planeta Venus y de sus ciclos en la cultura "tolteca" mesoamericana, por así denominarla de manera general en relación con las matemáticas mesoamericanas, por la tanto también es curiosa esta figura basada en el triángulo.
Tengo que encontrar más documentación, pero me parece muy interesante al hilo de conectar el hexagrama con el octógono (y la estrella de dieciséis, por ende). Es indudable que las religiones del Libro beben de estas fuentes para adoptar sus símbolos. Os enlazo una correspondiente a una estrella de dieciséis que me ha llamado mucho la atención cuando la ví por casualidad en la red por parte de uno de mis contactos.
¿Dieciséis periodos sinódicos de Venus?
revistas.unam.mx/index.php/ecm/article/view/32711
Seguiremos investigando. ¡Saludos!